FOMECAR

Muchas personas lo ignoran, pero a nivel global existe un mercado de Carbono. El cambio climático ha obligado a las naciones de todo el mundo a tomar medidas que compensen el daño que hemos hecho a la naturaleza.

Es por eso que con este mercado del Carbono, los individuos, las empresas o los gobiernos, pueden vender o adquirir “reducciones” de gases del tipo efecto invernadero. Este mecanismo se creó para cumplir con las metas plasmadas en el Protocolo de Kyoto y tiene como objetivo que los países cooperen para reducir los gases que contribuyen al efecto invernadero.

Con estos bonos, las empresas o países que se ven comprometidos a reducir su emisión de gases, financian proyectos o empresas limpias que reducen su porcentaje de emisiones, para que estas puedan “traspasarles” dicha reducción a otras empresas.

Se le llama entonces  “bonos de carbono” a las Reducciones Certificadas de Emisiones de Gases Efecto Invernadero, (CERs  por su sigla en inglés).

Un CER es equivalente a una tonelada métrica de dióxido de carbono. Estos créditos son comercializados en un Mercado de Carbono.

Para incentivar a las empresas mexicanas a participar dentro de dicho mercado, Bancomext instituyó el Fondo Mexicano de Carbono para apoyar los proyectos bajo el Mecanismo de Desarrollo Limpio con asistencia financiera y que puedan ser registrados ante la Junta Ejecutiva de Naciones Unidas para la acreditación de bonos de carbono.

Actualmente se están apoyando proyectos relacionados a la instalación de biodigestores, energía eólica, aprovechamiento de gas metano en rellenos sanitarios, etc.  Al mes de septiembre de 2010, Fomecar ha hecho aportaciones por 2.9 millones de pesos a proyectos que representan inversiones cercanas a los 1.3 mil millones de pesos y que permitirían una generación anual de hasta  1.3 millones de  Bonos de Carbono.